domingo, 8 de julio de 2012

DIALOGANDO CON CONFUCIO


Confucio
“Si el príncipe utiliza las rentas públicas para aumentar su riqueza personal, el pueblo imitará este ejemplo y dará rienda suelta a sus más perversas inclinaciones; si, por el contrario, el príncipe utiliza las rentas públicas para el bien del pueblo, éste se le mostrará sumiso y se mantendrá en orden.”

Confucio, lamentablemente, hoy en día, 2 500 años después de tus sabias palabras, hay más príncipes corruptos que estadistas que den el buen ejemplo a la población. ¿Qué significa esto? ¿Qué no estamos evolucionando en la dirección correcta? ¿Qué no tenemos redención?

“Si el príncipe o los magistrados promulgan leyes o decretos injustos, el pueblo no los cumplirá y se opondrá a su ejecución por medios violentos y también injustos. Quienes adquieran riquezas por medios violentos e injustos del mismo modo las perderán por medios violentos e injustos.”

Confucio, cerrar las calles es la protesta más común en mi país. Se habla de la afectación y el perjuicio que sufren los terceros, los inocentes transeúntes, pero los protestantes replican: ¿Qué hacemos si las autoridades están más interesadas en sus propias chequeras que en atender nuestras demandas?

“Sólo hay un medio de acrecentar las rentas públicas de un reino: que sean muchos los que produzcan y pocos los que disipen, que se trabaje mucho y que se gaste con moderación. Si todo el pueblo obra así, las ganancias serán siempre suficientes.”

Confucio, ¿sabes que los nuevos príncipes aplican una vieja fórmula con nuevo nombre? El populismo. Subsidian a todos aquellos que les sirven para sostenerse en el poder. No les importa que las arcas del estado queden anémicas, siempre que así no ocurra con sus bolsillos.

“La pompa y la ostentación sirven de muy poco para la conversión de los pueblos. Los hombres ambicionan las riquezas y los honores, pero si no es posible obtenerlos por medios honestos y rectos, deben renunciar a estos bienes. Los hombres huyen de la pobreza y de las injurias, pero, si no pueden evitarse por caminos honestos y rectos es preciso aceptar estos males.”

Maestro, si te sentaras un par de horas frente al televisor y luego caminaras otras cuantas dentro de un centro comercial, verías cuanto está la gente dispuesta a renegar de su realidad y a hacer lo que sea por aparentar lo que no son, por disfrazarse.

“Un hombre digno debe ayudar a los necesitados, pero no aumentar los bienes de los ricos.”

Como se ve que no conoces de teletones, fundaciones y rifas benefactoras. Negocios maquillados de benevolencia. El significado de beneficencia, hoy en día, parece ser deducción de impuestos fiscales.

“¿Cuál es la esencia de un buen gobierno? No resolver los asuntos con precipitación y no buscar el propio provecho.”

¡Qué va! A los actuales gobernantes solamente les falta titular como propiedad suya al territorio nacional. El país lo manejan como una hacienda que únicamente debe rendirle réditos a ellos y no a la comunidad.

“Si la ganancia o el provecho se anteponen a la justicia, los súbditos nunca estarán satisfechos y el príncipe se hallará en un peligro constante.” 

Tristemente, ese no es nuestro caso, acá la mayoría de la gente en el fondo de su corazón aplaude el latrocinio; creo que piensan que les puede tocar, eventualmente, su pedazo de pastel.

1 comentario:

Carlos Pavel dijo...

Buenísimo. Lo comparto.
Saludos