viernes, 21 de junio de 2013

¿LA POLÍTICA ES PARTE DE LA CULTURA?



“La política es historia, la política es defender el movimiento de la historia, la vida en movimiento defendiéndose a sí misma y la gente movilizándose para defender la vida.”
Rita Segato
No acabo de entender porque separamos la cultura de la política. Entiendo a la primera como todo el quehacer humano, y la segunda, aunque sea la más sucia de las politiquerías, es una faena realizada por seres humanos. Por más que me parezcan bestias rumiantes o fieras voraces, los dirigentes políticos son miembros de mi especie: la humana. Por ende, tienen cultura.
La corrupción de los políticos es posible gracias a la complicidad e ingenuidad, por no decir estupidez, de la ciudadanía en general. Pero los crédulos, pese que no tengo buena opinión de ellos, siguen siendo parte de mi especie: la humana. Por ende, tienen cultura.
Conclusión: la corrupción y la credulidad, por humanas, son parte de la cultura.
Para los griegos el idiota era aquel ciudadano despreocupado de los asuntos de la polis. ¿Será esa la verdadera incultura? ¿No entender ni participar en los sucesos de la comunidad?
Pienso que sí. El éxito de los dueños del poder consiste en despolitizar la vida cotidiana. Crearon especialistas en la materia, sólo ellos saben como hacer política; aunque escucharles sea un grave castigo para cualquier oído. Eso tiene una razón: quitarle a la ciudadanía la obligación de vigilar los actos del estado. Que pierda de vista su propia opresión. Un ciudadano despolitizado es un ciudadano que ha sufrido una terrible amputación en su cultura. 
Ya es tiempo de abandonar esos lentes que nos boicotean la visión de la realidad, que nos fuerzan a ver a la cultura como un cuerpo sin lados oscuros; eso no es humanamente posible. Dejemos de vernos como los impolutos que no somos parte del problema. Sólo así seremos los humanos que resolvemos las dificultades. Dejemos de ser idiotas, seamos ciudadanos.

1 comentario:

Unknown dijo...

Bueno amigo, a mi entender se tiene mala comprensión de ambas palabras. Así que debemos empezar por ahí. Tan solo para dar un ejemplo te puedo decir que una cosa es política y otra politiquería, casi un sinónimo de demagogia y chavacanería.
Podemos situarnos en la atiguedad, pero no saldremos de las confusiones si antes no tomamos en serio el pensamiento de que la política propiamente dicha, se da en todo y está en todo. No podemos abstraernos a ello. Forma parte de nuestra vida.
Si vemos injusticias y no adoptamos una postura en contra de ella, entonces la estamos aplaudiendo que es peor y más grave, porque lo peor es soslayar (MLK)
SALUDOS